El uso de props o elementos en el Yoga Iyengar

El método Iyengar es mundialmente reconocido por el uso de props o elementos.

Dentro del yoga existen diferentes estilos, cada uno tiene sus características determinadas que lo hacen único, especial o diferente. Si bien las posturas se repiten, es el abordaje de las mismas lo que va cambiando según el estilo que se practica.

Si vamos para atrás en su origen, podemos observar que B.K.S Iyengar comenzó a utilizar objetos cotidianos que le parecieron útiles y prácticos como soporte y peso para realizar las posturas.

Al principio tomaba piedras y ladrillos que encontraba en la calle para ayudarse a dominar los asanas y así se dio cuenta de que podía usar objetos externos a su favor en su aprendizaje.

A partir de este descubrimiento comenzó a implementar todo lo que se encuentra en una casa. Paredes, cajas, cinturones, sillas, almohadones y bancos fueron medios para experimentar esta nueva forma de profundización.

El termino prop llego más tarde. La metodología en la utilización de los elementos llego después de la creación del instituto. Los elementos se fueron perfeccionando y fabricando espacialmente con un carpintero que trabajó en ellos bajo la guía de Guruji.

Hoy contamos con gran variedad de instrumentos que son de gran ayuda a la hora de abordar las posturas, comprenderlas y profundizar en ellas.

Lo más importante sobre los props es que hay que saber usarlos. El uso de props es un verdadero arte y debe hacerse responsablemente. La forma y el momento en que se utilizan hará la gran diferencia. Se trata de agudizar la escucha y aprender a observar cómo y cuándo usarlos.

Para aprender a usar los props hay que practicar. Un artículo no puede describir a la perfección como se utilizan y cuáles son los beneficios porque el yoga y sus beneficios deben ser experimentados. En este sentido las palabras quedan cortas, no alcanzan. Si se quiere aprender a utilizar los elementos se debe acudir a un profesor certificado de yoga Iyengar que pueda asistir en la experiencia.

Si bien lo único que necesitamos para la práctica de asanas es nuestro cuerpo, los props, son elementos muy valiosos que van a aportar claridad ayudándonos a acercarnos a un asana, reconocer ciertas acciones dentro de ella, afianzarlas o a permanecer más tiempo en una postura determinada.

Son muchos los beneficios que obtenemos a partir de la implementación de elementos, a continuación, mencionaré algunos de ellos:

Los principiantes pueden practicar posturas, aunque no cuenten con la flexibilidad necesaria.
Permiten una mejor y más precisa alineación en las posturas.
Hacen posible adaptar la practica para situaciones particulares donde hay lesiones o limitaciones específicas. Personas enfermas que no podrían realizar el asana se benefician con el uso de props teniendo posibilidad de realizarlas.
Se pueden sostener las posturas por más tiempo y así profundizar en ellas.
Dan información externa sobre las acciones dentro de los asanas.
En la práctica de posturas restaurativas nos permite relajar el cuerpo y así comprender el trabajo de las posturas sobre la mente y el cuerpo orgánico.
Sirven para marcar dirección o dejar huella en el cuerpo para poder interpretar y luego reproducir las acciones.
Pueden ser realizados por practicantes de todos los niveles, la forma de utilizarlos va a variar según la experiencia del practicante.

Si estás pensando armarte un kit para practicar en tu casa te recomiendo que empieces con los más básicos que te menciono a continuación:

yoga mat: existen de diferentes materiales y grosores, fijate que sea bien antideslizante para que te ayude a agarrarte bien en tu práctica.
Tacos de madera: suelen tener tamaño estándar y te conviene comprar 2 iguales ya que las opciones para usarlos se multiplican cuando tenés el par.
Cinturones: te recomiendo los de cinta de algodón. Tenés 2 medidas básicas, de 2 y de 4 mts. Esta bueno si podés tener los 2 porque son para usos diferentes e incluso vas a poder usarlos juntos en varias oportunidades.
Bolster: fijate que este relleno de estopa para que tenga la densidad necesaria para hacer de soporte.
Mantas: las ideales son las de algodón clásicas, pero acá en Argentina es difícil conseguirlas. Podes optar por las clásicas de lana o las de hilo que suelen tener flecos. Lo ideal sería tener 3 para que te sirvan para hacer sarvangasana.
Silla: son sillas plegables súper resistentes diseñadas para recibir peso en el asiento en ambos lados, en el respaldo y para poder usarlas dadas vueltas. En Argentina hay 3 opciones de sillas, cualquiera te va a servir, pero te recomiendo asesorarte y elegir la más adecuada para vos según tu peso y altura.
Kuruntas: son sogas de algodón anudadas que se cuelgan de ganchos en la pared. Un juego de kuruntas son 4 sogas. Los anclajes pueden ser de hamaca paraguaya (cerrados) o unos específicos que vienen en forma de U. Las alturas son 2mt el más alto y 1mt el del medio. Te recomiendo que a la altura de los tobillos instales otro set de 2 ganchos para hacer tracciones desde abajo.